Las Raíces

Una tradición centenaria.

Al igual que la mayoría de nuestros símbolos culturales, el tequila tiene antecedentes en el mundo prehispánico. Antes de la Llegada de los españoles, los jugos del agave, empleados en prácticas rituales de fertilidad y curativas, eran cocidos y fermentados para hacer una bebida llamada mezcalli (que en náhuatl significa “piña cocida”). Según la tradición, fue un regalo que el señor del fuego hizo a la diosa Mayahuel.

En el siglo XVI, los españoles aportaron la técnica de destilación, con la cual el mezcalli se transformó en vino mezcal. Esta industria fue desarrollándose hasta que en el siglo XIX el tequila se fue distinguiendo del resto de los destilados de agave, ya que este se produce con solo una de las más de 100 especies que existen: el Agave Tequilana Weber, variedad azul.

Durante el siglo XX , la industria entra en su etapa moderna, utilizando tecnología de vanguardia en todos sus procesos productivos, logrando un producto cada vez más puro y de mayor calidad. En 1974 la Secretaria de Industria y Comercio resolvió proteger la Denominación de Origen «Tequila», al establecer un Territorio de Denominación de Origen (TDO).

Hoy en día el tequila se ha convertido en uno de los destilados de mayor consumo en el mndo y es símbolo de la identidad cultural de México.

Mayahuel